Es mucho más desesperante cuando te encuentras rodeado de actores que recrean una y otra vez su falso papel en el que intentan hacerte creer que eres "alguien" lo suficientemente importante como para escucharte, entenderte e incluso a veces, comprenderte.

Pero en realidad no eres nadie (y lo más triste es que en el fondo lo sabes, pese a no querer admitirlo por desear vivir en el engaño de una pseudo felicidad).


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog