El amor joven es un lemming: nace para morir. Y te deja con ese tedio resentido que tú experimentaste por última vez cuando eras una adolescente que vivías en familia; ¿por qué no me dejas en paz, por qué no me comprendes, por qué no te mueres? Hasta que un día simplemente te vas, y mientras estás sentada en el autobús buscando con qué pagar el billete, cuentas las monedas sueltas que te quedan y descubres que has gastado diez años enteros de tu vida. La única diferencia estriba en que esta vez lo has hecho voluntariamente, y que cuando eras niña podías permitirte matar el tiempo. Pero ahora, cuando te miras al espejo, ves que es el tiempo el que te está matando a ti. Ves que ya no eres tan impecablemente joven; los golpes y los fracasos han ido dejando señales en tu cuerpo y en tu mente.
este tipo del mono del ejército se me acercó y me dijo, "ahora ha pasado lo de Kennedy, tendrás algo de qué escribir". se dice escritor, ¿por qué no escribe él sobre ese asunto? siempre tengo que recoger sus mierdas y metérselas en un saquito literario. creo que ya tenemos bastantes especialistas en el caso... ésta es la década de eso: la Década de los Especialistas y la Década de los Asesinos, y ninguno de ellos vale un cerote de perro cristalizado. el principal problema de una cosa como el último asesinato es que no sólo perdemos a un hombre de cierto mérito, sino que perdemos también beneficios políticos, espirituales y sociales, y esas cosas existen , auqneu parezcan tan altisonantes. lo que quiero decir es que en una crisis de asesinato las fuerzas reaccionarias y antihumanas tiendne a solidificar sus prejuicios y a utilizar todas las brechas como medios de echar a la Libertad natural del jodido taburete del final de la barra. no quiero presumir demasiado de estar ac...
El tiempo no tiene porque matar la imagen, da una diferente y en muchos casos, la mejora jeje
ResponderEliminarBesitos!!